¿Sabes qué es la tecnología RFID? Si alguna vez has perdido las llaves del almacén o de alguna unidad para salir a tu ruta de mantenimiento, justo cuando más prisa tienes, sin duda necesitas esta tecnología. Y es que no existe peor pesadilla que buscar por todos lados, revisar bolsillos, mochilas o incluso la basura, mientras el reloj corre en tu contra.
Ahora imagina que eso te pasa, pero con un equipo médico que debía estar ya en quirófano, o con unos sanitarios portátiles que solo se iba a rentar un par de horas y que debían entregarse en una zona industrial. Estas situaciones no solo generan estrés, también pueden ser un riesgo operativo, un problema financiero y una afectación directa a tu reputación.
Es así que para evitar situaciones así, cada vez más empresas están implementando RFID como parte de su estrategia de control y trazabilidad. Y aunque suene a tecnología compleja, la identificación por radiofrecuencia (RFID) es más común de lo que piensas; ya que está presente en etiquetas de ropa, tarjetas del metro, así como sistemas antirrobo.
Y sin duda, también puede ser un gran aliado para negocios de renta de equipos. Así que en en este blog te explicamos qué es, cómo funciona y qué beneficios puede traerle a tu operación:
¿Qué es el RFID y cómo funciona?
RFID (por sus siglas en inglés, Radio Frequency Identification) es una tecnología que permite identificar y rastrear objetos mediante señales de radio. Cada objeto (en este caso equipo) lleva una etiqueta (tag) con un chip y una antena que transmite su información única a un lector. A diferencia de los códigos de barras, el RFID no necesita contacto visual directo para escanearse, lo que lo vuelve mucho más ágil y preciso.
En otras palabras, puedes saber qué equipos tienes, dónde están y qué movimiento han tenido, sin necesidad de escanearlos uno por uno. Una sola lectura puede identificar decenas de ítems en cuestión de segundos.
Beneficios del RFID para empresas de renta de equipo profesional
Para una empresa que se dedica a la renta de maquinaria, unidades móviles, equipo audiovisual o incluso herramientas quirúrgicas, el control lo es todo. Y aquí es donde el RFID brilla. Pues algunos estudios indican que las empresas que implementan RFID en su cadena de suministro, logran mejorar hasta en un 30% la precisión del inventario y reducir hasta un 50% el tiempo de búsqueda de activos.
Con RFID puedes:
- Rastrear en tiempo real dónde se encuentra cada equipo.
- Reducir pérdidas por extravío o robo.
- Agilizar procesos de entrada y salida en almacén.
- Garantizar que el equipo entregado es el correcto y en las condiciones registradas.
- Automatizar auditorías y conteos físicos.
Este nivel de precisión se traduce en ahorro, eficiencia y una experiencia mucho más profesional para tus clientes.
RFID y mantenimiento: una dupla ganadora
Más allá del control de ubicaciones, el RFID también puede ayudarte a gestionar mejor el mantenimiento de tus activos.
Ya que al integrar etiquetas RFID con un sistema de gestión, puedes registrar cuándo fue la última revisión técnica, qué refacciones se le colocaron y cuál es su historial de uso. Esto te permite programar mantenimientos preventivos y mantenimiento predictivos con base en el uso real, y no solo en fechas estimadas. Así reduces tiempos muertos, evitas fallas en campo y extiendes la vida útil de tus equipos.
¿Qué considerar antes de implementar RFID?
No hay duda que sus beneficios son evidentes, pero implementar RFID requiere una planeación estratégica. Por eso es importante elegir los tags adecuados para cada tipo de equipo (no es lo mismo una consola de audio que una retroexcavadora), verificar que tu almacén tenga zonas de lectura eficientes y capacitar al personal en el uso del sistema.
¿Qué sigue? Sacarle todo el potencial de tu negocio sabiendo que estás apostando por soluciones tecnológicas que te permitirán competir en el mercado.
Y hablando de otras soluciones, ¿ya conoces OLIVER?